El favorito del Rey Dragón
Capítulo 8
Mientras volábamos, vi un árbol que era tan grueso y alto como un rascacielos japonés. Es probable que, ya que se trata de un árbol enorme, tenga muchas ramas y hojas verdaderamente frondosas. Tal vez incluso hay animales… Aunque estoy volando a unas decenas de metros del suelo, de todas maneras, tengo que elevar mi cara para verlo bien. Es demasiado exagerado, tanto que me hace sentir abrumado.
Ciertamente, estoy en un mundo diferente…
El rey dragón descendió con lentitud a una parte del árbol. Es una rama ancha y estable como si fuera una pequeña sala. Wow, las hojas dan miedo. Son casi tan altas como yo, como el dragón incluso. Y cuando miro hacia arriba, me doy cuenta de que la luz del sol se oculta completamente.
—Vamos a comer aquí, mi niño. Es bueno descansar después de volar de esa manera.
Cuando me alejé del extremo de la rama, el rey dragón pareció concentrarse un momento antes de hacer aparecer una alfombra similar a las que ocupábamos en el Castillo de Shirasagi. Incluso hay muchas cacerolas y platos con arroz.
El rey dragón no lanza hechizos verbales, por lo que parece poseedor de un tipo de magia muy poderosa e inusual.
Las ranas me habían preguntado si quería comer algo antes de despegar… Pero la razón por la que me fui diciéndoles que no era porque tenía miedo de vomitar si me movía descontroladamente sobre la espalda de un gran dragón. No sabía que estaría tan preocupado por eso.
Por lo general, no hablo mucho durante la hora de la comida y no importa demasiado ya que el rey dragón se dedica completamente a comer… Pero hoy estoy muy emocionado.
—Este es un mundo realmente hermoso. ¿Esto es parte de Lütbya?
—Un distrito… Pero tiene un nombre completamente diferente.
—¿Ah…? ¿Cuál?
—Esto es Orierio.
—Sí, Orierio. Después de salir de Lütbya me sorprendió ver el desierto. ¡Pero después de eso había mucho verde! ¿Viste? ¡El árbol es enorme!
Ryuo se veía feliz, pero estaba comiendo salvajemente como siempre. Arrojándose una gran cantidad de carne cruda a la boca.
—El castillo de Shirasagi tiene un ambiente algo venenoso para los humanos. A mis favoritos los dejaba conmigo hasta que era necesario marcharse, pero contigo… Pensé que tal vez podías ir a Lütbya y pasar una temporada allí hasta descontaminarte por completo. Para… que después volvieras junto a mí. Quería que vieras este bonito paisaje.
—Oh…
No quería tener esperanzas, así que decidí ignorarlo. Ciertamente, en mi primera visita a Lütbya, me di cuenta de que el sol brillaba con mucha fuerza y hoy estoy sintiendo un aire delicioso. Algo propio de la naturaleza… Me sentía mucho mejor de salud.
Mis mejillas están calientes. Al parecer, aunque lo intente, no tengo experiencia y no soy lo suficientemente inmune a su actitud tierna y palabras lindas.
—Por cierto, Ryuo-sama… ¿En dónde naciste?
—¿Dónde nací?
—Sí… ¿Tienes papá y mamá? ¿Cómo naciste? ¿Cuánto tiempo has estado vivo desde que se hizo este mundo?
—Vaya, mi niño está preguntando muchas cosas hoy.
Dejé de comer y miré la cara del dragón, que era parecida a un triángulo invertido… Pensé que tal vez lo había hecho sentir incómodo y enfermo con mi inesperada actitud.
—¿Te enojaste?
—No, no. Nunca… Riku vino de un mundo diferente, así que me alegra que esté tan interesado en mí.
Estaba emocionado, porque aparentemente no parecía sentirse mal después de que le hiciera tantas preguntas. Dijo: “Espera un minuto”, y Ryuo comenzó entonces a limpiar tanta comida como pudo con ayuda de su inmensa lengua. Al verlo, intenté imitarlo y comí tanto como pude también.
Me dijo que intentara estar quieto un rato, porque no creía que fuera bueno volar justo después de comer.
Está bien para mí tomar un descanso de la comida, pero… ¿Es necesario estar sentado entre las piernas del rey dragón con sus manos alrededor de mi cintura? Además, cada vez que se encuentra con mis ojos, él sonríe y me besa como si fuera un amante encantador.
¡¡Esto definitivamente no puede ser justo!!
Incluso tocarlo y mirarlo y dejar que me bese… Todavía me deja completamente perplejo. A diferencia mía, que era un hombre tímido e irresponsable, Ryuo siempre estaba de buen humor e irradiaba una luz preciosa.
—Cariño, voy a contarte todo lo que deseabas saber… Yo no tengo familia. No nací de nadie, no tengo madre o padre y no sé si sea posible que dé vida a alguien más.
Aunque las ranas dicen que sí.
—Ok…
—Sí. Yo… realmente espero que eso pueda ser posible. ¿Sabes? Al inicio pensaba que era algo estúpido, pero ahora me pregunto ¿cómo sería? ¿Mis hijos nacerán de un huevo como nací yo?
Huevo… ¿Nació de un huevo?
Bueno, podrá ser un tipo de reptil, pero debido a que también lo veo como un humano… Me parece un poco gracioso que diga eso.
—Tienes toda una vida para averiguarlo…
—Supongo que sí… Aunque es diferente de generación en generación. Algunos dragones mueren en cientos de años, otros viven alrededor de ocho mil años.
—¿Tanto? ¿Y si tienes algún accidente o te enfermas?
—Desafortunadamente, no podemos morir de una lesión o de una enfermedad.
—Suena difícil…
Si inclinaba la cabeza y miraba al Rey Dragón, me sorprendía que él ya estuviera buscando mis ojos con su pequeña ceja levantada.
—Desde el momento en que nací, gobierno los ocho mundos en función de la información que se introdujo en mi cabeza. Esa es la misión dada a “Ryuo”. Todos los días, estoy pensando en los ocho mundos. Todos los días promuevo el nacimiento de la vida y eventualmente la mato. Manipulo el clima y los desastres naturales, a veces creo un fuego de guerra, un desastre. Pero es un trabajo monótono. Cuando encontraba un “favorito”, solo me nutría por un tiempo porque esa era la intención… Alimentarme. —Toma un respiro, hace una mueca—. Me canso de todo, y de repente tengo una necesidad enorme de destruir cada cosa que hay a mi alrededor. ¡Quiero destruir todo! Si lo hago, voy a morir… A veces me gustaría morir.
Si destruye el mundo, entonces también será destruido.
Todos los días, desde el momento en que nació, le dejaron una inmensa carga y demasiadas responsabilidades. Está solo, en un castillo donde no hay gente, amigos, personas o sus padres… Y solo hay ranas que se encargan de servirle.
Fui comprensivo de inmediato.
Imaginé su cuerpo, su modo de andar por esos inmensos pasillos blancos, su expresión… Y de repente me dieron muchas ganas de llorar. Las razas son diferentes por lo que la forma de pensar es completamente diferente también y la forma en la que se perciben las cosas puede ser distinta, pero desde que nació… Ryuo ha vivido solo durante miles de años. No hay familia, ni amigos, y no tiene un nombre único porque Ryuo significa Dragón.
Es incómodo reflejarme tanto en él…
Yo tenía padres, pero era como no tener. Mi madre me odiaba, mis hermanos me odiaban… Era igual al aire en la comunidad escolar. Solo hubo maestros y estudiantes que me intimidaron o me hicieron quedar en ridículo sin voltear a ver lo lastimado que me dejaban. Kaito se burlaba y solo me decía cosas malas… ¿Qué tan bajo debí haber caído para pensar que no importaba lo desagradable que fuera mientras hablara conmigo?
Lamentablemente, las lágrimas salieron cuando pensé que Ryuo había vivido tan solo como viví yo.
—Mi niño… Lo siento. ¿Lo que dije te asustó? ¿Qué pasó?
—Oh…
Ryuo parece muy preocupado por mí.
—Ryuo-sama, pensé… Que debiste sentirte muy solo cuando no tenías un favorito con quién estar.
Ahora parecía bastante sorprendido. ¿Fui grosero? ¿Es muy extraño? ¡¿Pero qué debo hacer?! ¡Las lágrimas no pueden parar así como así!
—Viviste cien años sin nadie… Eso para mí, es mucho tiempo, no lo puedo imaginar.
—Vaya… ¿Lloras por mí? Pensé que te había asustado cuando dije que quería destruir todos los mundos… —Las lágrimas derramadas sobre mis mejillas, fueron lamidas por su tierna lengua—. ¿Mi soledad es más importante que destruir la Tierra?
—Sí…
—¿Por qué…?
No creo tener el valor necesario para hablar de mis sentimientos… Porque cuando descubres que algo que crees que es muy lindo y adorable en realidad es descuidado y feo, entonces comienzas a compararlo y a despreciarlo como… Como si la magia se perdiera.
De todos modos, abrí la boca y dije:
—Ryuo dice que le gusta mi apariencia por alguna razón… Pero la realidad es que soy feo. No soy bueno en nada y mis manos son muy torpes. No importa lo que haga, no tengo luz como tú y no puedo decir que sea inteligente en absoluto… No había nadie conmigo en Japón… Todos los días eran solitarios y terribles y también… También había pensado en morir…
—Riku…
—Incluso en… Lütbya… No tengo valor… ¿Ryuo va a odiarme también en algún momento?
Mis lágrimas no se detenían aunque tratara de limpiarlas con el dorso de mi mano o con la ropa. Ryuo sacudió la cabeza.
—¿Por qué dices eso?
—Cuando mi alma se distorsione de nuevo, me iré y buscarás a otro favorito ¿No es verdad…? ¡Pero está bien! Porque fui tu consuelo cuando lo necesitabas más.
¡Estabas solo hasta que llegué yo! Entonces… Entonces no es como si no valiera nada. Fui útil… Y estoy feliz.
—No es así… —Sus brazos me sostienen firmemente, me junta contra su pecho y me acaricia lo mejor que puede hacerlo con sus manos temblorosas—. Te quiero mucho ahora. Tanto que no puedo pensar que este sentimiento se vaya a enfriar…
No puedo ver su rostro si lo deja oculto en mi hombro, pero, cuando le devolví el abrazo… Me di cuenta de que habían aparecido escamas sobre su piel. Sus ojos tienen pupilas alargadas de una manera vertical.
—Ry… Ryuo-sama. ¿Tu celo…?
El rey dragón jadea con fuerza y un suspiro caliente choca entonces contra mis oídos. Me hace sentir extraño. ¿Deberíamos volver a la ciudad? Aunque en este estado…
—Mano… Te lo haré con la mano.
Fue bastante vergonzoso ofrecerlo, lo sugiero porque no sé qué más podemos hacer ahora.
Aunque lo había dicho con una voz muy pequeña, extendí la mano hacía su pene duro e intenté bajarle la tela.
—Riku…
El rey dragón lleva un traje con un color y un acabado diferente al mío. Cuando lo estaba tocando, descubrí que la parte inferior tenía varios botones e hilos que volvían todo más complicado. Hice lo mejor que pude y dejé que mis manos se colaran para ayudarlo.
Vaya… La punta estaba mojada. ¿Desde cuándo se aguantó? Toqué los genitales irregulares que tenían una superficie diferente de la de los humanos. Sin embargo, ya que los dos somos hombres… Debería sentirse bien si lo hago en las partes que me gustan a mí, ¿verdad?
Como no puedo apretar todo con una sola mano, intento moverme y acariciarlo con las dos… De repente, me sentí muy extraño. Aunque había derramado muchas lágrimas hasta hace un momento, mi cara estaba extrañamente seca y mi cuerpo estaba demasiado ligero como para tratarse de algo normal…
¡Y mi ropa desapareció!
—¡Espera!
¡¿Qué tipo de juego perverso es este?! Al aire libre, desnudos y bajo un inmenso árbol.
Incluso si entiendo que no tiene sentido alguno, dejo que él sostenga mi cuerpo con ambas manos, se acueste de espaldas a la rama y coloqué mi trasero encima de su cadera.
—¡No, no! Ryuo-sama, esta postura no es…
—Riku, por favor déjame hacerlo así. ¿Está bien? Quiero amarte de todas las maneras posibles el día de hoy, tanto como pueda…
Su pene está completamente húmedo y mi entrepierna no deja de palpitar.
—¡Por favor! ¡Espera…!
Pero comienza a hundirse en mí…
Uh… Esta situación es de un nivel demasiado alto para un estudiante de secundaria que además era absolutamente virgen.
Puedo escuchar los sonidos eróticos desde la parte en la que estamos conectados, el entrar y el salir… ¿Por qué el sonido siempre es tan intenso y húmedo? Además, una sensación de entumecimiento se extiende desde la parte inferior de mi cuerpo y me sube por todo el ancho de la espalda.
Este cuerpo, el que fue amado por él durante varias semanas y meses, es mucho más sensible que antes y parece querer más y más del placer que me da. Cuando me besa y su lengua penetra mi boca… Me siento tan bien que se me adormece la cabeza.
Las caderas de Ryuo temblaron al frotarse y la tensión dentro de mí me hizo sentir que podía comenzar a gritar.
Dios, de verdad se siente maravilloso…
Cuando mentalmente comienzo a alabar sus genitales, mi cuerpo se desliza debido a la diferencia de altura… De todas maneras, quiero dar lo mejor de mí para que Ryuo se sienta incluso más encantado de lo que estoy yo ahora.
Lo aprieto y hago que mi cintura comience a balancearse libremente… Al mismo tiempo, siento que las puntas húmedas de sus dedos se arrastran entre mi trasero y también, que se acomoda de otra manera para hacer que sus dedos acaricien mi pene.
—Riku… No tienes nada de vello aquí. Que encantador.
—Ah… —Es grosero decir que no hay nada en mi entrepierna así que… Probablemente no debería estar tan inmensamente feliz justo en este instante—. Nh
… Ryuo…
Ambos nos emocionamos de más y alcanzamos rápidamente el orgasmo. Frotamos nuestros penes, nos tocamos y al final terminé por eyacular sobre el pecho de Ryuo… Como había logrado ensuciar bastante, fui limpiado rápidamente por él y después, incluso me vi abrazado tiernamente mientras continuaba estando desnudo. Tembloroso y tratando de inhalar un aire bastante pesado.
Muchos besos bajaron enseguida.
—Riku, mi Riku. Eres tan lindo… Tan inmensamente lindo. Te quiero tanto. Solo puedo pensar en lo feliz que deseo hacerte y en lo mucho que anhelo sujetarte entre mis brazos para siempre. Justo así…
En la frente, mejillas y orejas, un beso dulce parece incluso penetrar las suaves partes de mi piel hasta mezclarse con mi sangre. Ayer decía cosas lindas como esta, pero hoy sonaba mucho más impaciente y desesperado que nunca antes.
Como si quisiera darme a entender su verdadera intención.